Privado Depp

-Eso es porque uds. empezaron demasiado chicas con esto... aparte en este lugar, es como si todas fueran una familia, amor.-
Acaricie su mejilla con la punta de mis dedos, haciendo un contacto más pleno tras unos segundos.
-Lux puede que no sea feliz, pero estoy seguro de que te agradece a sobremanera el hecho de que la sacarás del bar de Tony... y tú no obligas a nadie a estar aquí, tienes que grabarte eso.-
Hablaba con suavidad, deseando tranquilizarla con mis palabras.

Suspire pesadamente y me aferre a él.
-Gracias por intentar hacerme sentir bien.-
Dije en tono bajo mientras me acomodaba en la cama para poder abrazarlo mejor.
-Te amo demasiado.-

-No agradezcas mi amor...-
La abracé, pegando su cuerpo plenamente al mío y besé sus labios suavemente.
-Yo quiero que siempre estés bien.-
Aparte un mechón de su cabello y luego apoye mis manos en la parte baja de su espalda.

Escondi mi rostro en su pecho y deje un suave beso en el.
-A tu lado estoy bien... tu me haces bien.-
Dije en tono bajito, aferrandome aun más a su cuerpo.

-Entonces tendré que estar a tú lado por siempre.-
Dije sacrificadamente, con una sonrisita en los labios.
Despacio, deslice mis manos por su cuerpo, llegando a su trasero, donde reparti suaves caricias mientras rozaba su sien con mis labios.

-No te queda de otra.-
Dije en tono algo triste y luego levante mi rostro para poder mirarlo.
-Harias ese sacrificio por mi?-

-Por ti haría cualquier sacrificio... pero esté no es uno de ellos, quiero estar contigo porque así lo he deseado desde que te conocí; por eso no dude en casarme contigo. Quería que fueras mía por siempre, porque te amo como nunca pensé que podría hacerlo.-
Sonreí con total suavidad, acariciando sus labios de una forma realmente cariñosa y delicada.

-Aunque me hayas pagado la primera vez que te acostaste conmigo?-
Dios! siempre me iba a molestar esa situación... Mi primera vez habia sido... Algo que era mejor no recordar.. Pero.. tener claro que la primera vez que habia hecho el amor con el habia sido por dinero era algo que me molestaba demasiado.

Hice una mueca y suspire.
-Amor, el dinero fue algo extra... para mí no cuenta como que te pague por eso.-
Me encogí de hombros.
-Creo que te demostre que desde la primera vez, para mí era mucho más que sexo... y yo no pague por eso.-
Es que era raro de explicar y de entenderse; pues si le había dado el dinero pero para mí no significaba algo ese hecho, pues para mí ella nunca fue una prostituta.

-Hay veces en que desearia ser una de esas niñas ricas qeu jamas se han acostado con alguien.-
Suspire pesadamante. Es que todo el mundo me conocia por eso.. Por ser prostituta, aunque ya no lo hiciera... Y me daba terror que en un futuro si es que Chris y yo teniamos hijos ellos sufrieran y sus amigos se burlaran porque alguno de sus padres habia cogido conmigo.

-Hey.-
Levanté su rostro con una de mis manos para que me mirará, ya que seguía escondiendo su rostro en mi pecho.
-Nadie se va a atrever a tratarte como una prostituta, ¿entiendes?- dije con leve enfado.
Es que era la "ventaja" de tener un esposo que trabajaba en lo que trabajaba... nada más escuchaba algo malo de mi mujer, y sin importarme quien fuera, me encargaba de que esas fueran sus últimas palabras de su asquerosa vida.

-Mi amor.. no puedes ir por el mundo matando a las personas que lo digan... Despues de todo no es una mentira...-
Me encogi de hombros.
-Soy una prostituta.. El hecho de que ahora no lo haga no quiere decir que antes no lo haya hecho... Me da miedo pensar que alguien le dira algo a nuestros hijos... Me da miedo que nuestros hijos sepan de que se trata el negocio de su madre... Me aterra que se lleguen a avergonzar de mi.-

-Bueno... lo eras, ¿Y qué con eso? Lo hiciste para salir adelante y no hay nada de malo en eso. Nosotros no vamos a educar a nuestros hijos como que todo es malo en la vida; sabrán que en ocasiones no se tienen las facilidades como otras personas para llegar a sobrevivir a la vida... y lo entenderán, y estarán orgullosos de su madre por no rendirse, así como yo estoy orgulloso de ti, mi amor.-
Le sonreí suavemente para después estrecharla con fuerza.

Me rendi ante su abrazo y no segui con el tema sino seria algo de nunca acabar... Es que ni yo estaba orgullosa de lo que hacia, pero no habia otro remedio... Primero porque eran casi 10 años los que llevaba en eso (habia comenzado tan pequeña como Lux) y luego porque... a Pesar de que Chris lo negara, tambien corria peligro mi vida y en definitiva el Diamond Stars era el lugar más seguro de Death Valley, por esa razon yo pasaba todo el dia ahi.

Apoye mis labios sobre su sien y con mis manos acariciaba su cuerpo con total dulzura.
-Yo te amo... y absolutamente nada ni nadie, podrá cambiar eso, ¿entendido?-
Suspire con suavidad y la mire, sonriendo levemente.
-Y si en algún momento quieres alejarte de todo esto, dímelo, sabes que siempre contarás con mi apoyo.-

-No puedo hacerlo, Chris... Por más que quiera... No puedo.-
Es que era mi vida, y por muy idiota que sonara.. No era capaz de hacer otra cosa.
-Solo no dejes de amarme nunca... es lo unico que necesito para estar bien.-

-Nunca te voy a dejar de amar... nunca, nunca.-
Y si era sincero, eso me daba pavor, pues me sentía en sus manos... aunque a la vez seguro, pues tenía más que claro que nunca jugaría conmigo a su antojo.

Movi mi cabeza para besar sus labios con ternura por un instante.
-Ahora no se si prefiero que nos quedemos aqui o que vayamos a casa.-
Dije en tono berrinchudo.. Es que ya me estaba dando flojerita de levantarme de la cama.

Reí suavemente y me acurruque contra ella.
-Podemos quedarnos aquí, mi amor.-
Mientras hablaba, nos tape mejor con la cobija, quedando por completo debajo de ellas.
-O podemos hacer otras cosas... y pasar la noche despiertos.-
Hice un gesto coqueto, dedicándole una sonrisa.

-A mi me tienta eso de pasar la noche despiertos.-
Solte una suave risita y bese sus labios con ternura.
-Tu que prefieres que hagamos?-

-¿Y todavía lo preguntas? ¡Es más que obvio!-
Gire despacio, quedando sobre ella y me acomode entre sus piernas, separándolas con una de las mías.
-Si pudiera, me pasaría las 24 hrs haciéndote el amor.-
De forma suave moví mi cuerpo contra el suyo, de forma sensual.

-No me tientes... No dejare que salgas de este lugar si me ofreces algo asi.-
Mordi su labio inferior sensualmente mientras rodeaba su cadera con una de mis piernas y acariciaba su espalda con suavidad.

-Mmm... pues te lo ofrezco; tan solo apago el celular y que se las arreglen sin mí.-
Aunque eso era algo que siempre hacía cuando estaba con ella, pues no dejaba que nadie interrumpiera esos momentos cuando me encontraba a su lado.
Me apoye en mis brazos para separar nuestros torsos y así inclinar mi cabeza para besar su clavícula.

-Esta bien... 24 hrs... Sin interrupciones, de sexo desenfrenado.-
Cerre los ojos disfrutando de sus besos... Dios! Amaba a ese hombre y lo perfecta que me hacia sentir!

Sonreí abiertamente y la besé con toda la pasión que era capaz de sentir por ella, hasta que me quede sin aliento.
Me deslice un poco para poder alcanzar sus pechos con mis labios y entonces mordí mi labio inferior con deseo.
-Me encantan... son tan perfectos... me enloquece tenerlos en mi boca.-
Despacio acaricie el contorno de su pezón con mi lengua para después atraparlo con mis labios, dando una suave succión para después soltarlo.