Living.-

No podía sonreír más bobamente al escuchar ese "amor"; de hecho hasta me había quedado inmóvil al escucharlo, pero cuando retome las embestidas, ahora si fui totalmente salvaje, todo lo contrario a las caricias que repartía en sus pechos, las cuales eran suaves y tiernas.

-Angie...- volví a inclinarme sobre ella, besándola con total ansiedad mientras pasaba mis manos por debajo de su trasero para elevar su cintura un poco más, sintiendo como de ese modo, entraba aún más en su vagina.

Respiraba completamente agitado contra sus labios y de forma milagrosa podía mantener mis ojos abiertos, enloqueciendo al ver cada una de sus expresiones. Cuando me comencé a tensar, atrape su labio inferior con mis dientes para morderlo con un poco de fuerza, mientras arremetía con mayor intensidad.

Mierda, mierda, ¡mierda! Es que si hacía lo que me pedía, iba a ser la primera vez que me corriera antes que ella, y no era algo que me gustará demasiado, pero no me veía capaz de aguantar mi orgasmo por más tiempo. -Aaan... gie.- cerré mis ojos con fuerza y arqueé mi espalda violentamente cuando me corrí sin poder evitarlo; a pesar de eso, continúe embistiéndola con rapidez, para hacerla llegar cuanto antes.

Correspondía su beso con torpeza, debido a lo agitada que se encontraba mi respiración en ese momento. Deje caer mi cuerpo contra el suyo, con suavidad y al apartarme de sus labios, sonreí. -Cada vez me gusta más hacerte el amor, ¿sabes?-

-¿Cada Viernes?- hice un puchero. -¡Amor, eso es muy poquito!- seguía haciendo pucheros, como niño que esta apunto de hacer un berrinche.

Seguía haciendo pucheros, pero ante su beso sonreí suavemente. -Bueno... pero los Viernes será TODO el día, ¿verdad?- la mire con inocencia, acercando mis labios a los suyos.

La mire con ofensa, totalmente real. -¿De verdad podrías pensar que te quiero solo para eso? ¿Cuando te he demostrado que estoy completamente enamorado de ti?- entrecerre los ojos, mirándola atentamente.

-Ah bueno.- cambie mi expresión por completo, sonriendo alegre. -Me da gusto saber que sabes que te quiero... aunque mejor te digo que te amo, porque te quiero es muy poquito para lo que siento por ti.- atrape sus labios en un tierno beso para después apoyarme en su pecho.

Tras escucharla, pase mis brazos por debajo de su cuerpo para abrazarla con fuerza. -Me agrada saber eso... el día que comiences a amarme, yo voy a enloquecer de felicidad.- alcé mi cabeza para mirarla. -Mucho más de lo que ya estoy ahora, te aviso para que te hagas a la idea.- reí suavemente antes de darle un beso.

-Mejor asustarte por mi felicidad, que por otras cosas, ¿no?- me moví suavemente, apartándome de su cuerpo lentamente. -Ahora vamos a preparar algo de comer, porque tengo hambre... y tengo que recuperar fuerzas porque aún nos queda muuuchooo por hacer.- reí ligeramente y tome sus manos para jalarla y que se pusiera de pie.

-Oh, ya me hacía a la idea de que estarías desnuda todo el día.- fingí tristeza y al ver su expresión, reí. -Será interesante intentar cocinar algo, solo espero no quemar tu cocina.- sin darle oportunidad a responder, me encamine hacía la cocina.

Reí divertido y me gire hacía ella. -Sabía que te haría volver pronto con eso... Angie, se cocinar, ¿Si no como crees que he sobrevivido por 17 años?- me acerque a ella y apoye mis manos en su cintura, mirando velozmente su cuerpo de arriba abajo.