Habitación

Acaricie su espalda sin dejar de besarla y cuando nos apartamos, apoye mi frente contra su barbilla. -¿En que trabajos querías que te ayudará?- es que si no me distraía, iba a irme por otros lados con ella... y aunque lo deseaba, había quedado en ayudarla.

Mierda! Me había olvidado por completo de aquello >.< -Lo lamento.- es que todo había sido por andar buscando el regalo perfecto. -¿Hace cuanto que debí de haberlo entregado?- es que si no hacía mucho de eso, tal vez pudiera convencerla de que me dejará hacerlo en ese mismo momento... si no, pues tendría que aguantarme con reprobar.

-Es que...- baje la mirada y luego la volví a alzar. -No se si sea una buena excusa pero la verdad me olvide por estar buscando un regalo que resultará perfecto para ti.- sonreí ligeramente.

-Sin falta, te lo prometo.- sonreí y tome su rostro con mis manos para que no se apartará de mí y la besé dulcemente. Cada día me convencía más de que ella era un amor.

-Ni siquiera me llevo bien con los de segundo! Aparte yo no les dije nada a mis amigos cuando tú preparabas nuestro exámen.- lo más gracioso del asunto es que había visto el exámen y aún así no había sacado la calificación perfecta. Reí suavemente al recordar aquello y me puse a calificar las tareas.

-Ves? Pero no lo hago, mi amor... soy un niño bueno; ni siquiera yo mismo me aprovecho de ver las cosas antes de que las des!- aunque la realidad era que ella me distraía al punto que no me acordaba mucho de las cosas del exámen.

-Segura que lo que más me haya gustado?- alcé una ceja y solté una suave carcajada. -Porque si es así, mi trabajo va a ser un poco porno.- es que era más que obvio que aquel día había sido perfecto por lo que habíamos hecho en el autobus.

-En serio!?- dije con total sorpresa. -Yo tengo que ver ese ensayo!- es que el muy idiota de mi amigo, decía que no le gustaba Hannah, cuando era más que obvio que lo traía cacheteando la banqueta. -Bueno, si el hizo eso, entonces yo escribiré de lo ocurrido en el autobus.- sabía que Angie solo compartía con todos el mejor ensayo, y los míos nunca eran los mejores, por lo que no habría problema si solamente ella lo leía.

Me estire para tomar el ensayo, y tras unas cuantas líneas, yo ya estaba muerto de risa. -Quisiera ver... como se pone Hannah y Will... si lees esto frente a todos.- dije entre risas. No sabía que era mejor, si cuando hablaba de sus pechos o del trasero... vaya que mi amigo se había inspirado!

-Eres mala, amor!- deje escapar una carcajada y luego me acerque a ella para besarla. -Y me encantas totalmente de esa manera.- sonreí sobre sus labios. -El que yo haré, va a ser para ti... para que hagas cositas cuando no estemos juntos.- dije sensualmente.

-Pues primeramente, pensar en mí mientras tu temperatura corporal va subiendo y comienzas a sentir ganas de tocarte...- pegué mi cuerpo al suyo, acercando mi rostro a su oído. -Y conforme vas a ir leyendo, tu manita comenzará a cobrar vida propia y a pasearse por su cuerpo, tocando esos aquellos lugares que te causan más placer... susurrarás mi nombre y desearás que estuviera a tu lado para ser yo quien te toque.-

Sonreí suavemente y solté un suave gemido antes de continuar. -Tus pezones se irán endureciendo conforme te vayas acariciando... y cuando les dediques caricias a ellos, pensarás en mis labios sobre ellos, succiónandolos con fuerza y en mi lengua lamiéndolos con desesperación, dejándolos totalmente húmedos y duros.- de forma suave moví mi cuerpo contra el suyo; es que de solo pensar en hacer eso, ya me estaba excitando a sobremanera.