Tomando Sol.

-Yo lo intenté cuando estuve en... en vacaciones, pero fracase miserablemente.

La mire y sonreí con suavidad.

-Supongo que yo también estaré en la lista de aquellos que mueren de cáncer.

Por un momento me mantuve en silencio, pero luego suspire y volví a hablarle.

-¿Y a qué te dedicas ahora? Disculpa que sea tan cotilla, pero siempre he sido muy curioso.

Sonreí apenado. Eso era un vil mentira, ya que a mí no me interesaba hablar demasiado, pero eso no tenía porque saberlo.

-Soy la dueña de un bar.-
Sonrei con suavidad e instintivamente lleve mi mano al colgante con los dijes que me habia regalado Chris.
-El Diamond Stars... No se si lo conoces, pero es el Mejor de Death Valley-

-He escuchado de él.

Asentí con suavidad y ante su movimiento, baje la mirada.

-Pero no he tenido oportunidad de ir... hace poco que regrese de esas vacaciones, así que ando empezando de cero, por estos lados.

Rei con suavidad y abri mi bolso nuevamente. Tome una tarjeta y le di la vuelta para escribir unas cosas atras.
-Estas invitado por la misma dueña del Diamond.. Todo gratis... Quizas puedas ver a Chris si vas esta noche.-
Sonrei con suavidad y se la entregue.
-Solo tienes que recomendar el lugar a tus amigos.-

Tome la tarjeta que me entregaba, y esta vez una sincera sorpresa apareció en mi rostro... realmente la suerte estaba de mi lado.

-Gracias... será un placer ir a ver.

Leí lo que había escrito atrás de la tarjeta y sonreí.

-Entonces nos veremos esta noche.

Y si podía poner mi plan en marcha ese mismo día, sería el día perfecto.

-Por mi genial.. Aunque si quieres puedo llamar a Chris a ver si ya le falta mucho para llegar.. Pasaria por mi luego del trabajo.-
Sonrei con estusiasmo y busque mi celular.

Mi corazón latió con nerviosismo al escucharla, pero me mentuve calmo para seguir con la charada.

-No, no te preocupes.

Tome su mano cuando estaba por marcar e hice que la bajará.

-Las mejores cosas tardan en llegar, ya lo veré después.

Sonreí amistosamente.
Es que si él me veía, todo se iba a ir al demonio.

Me sorprendi un poco de que no deseara que lo llamara ya que todos los amigos de Chris se desesperaban por verlo.
-Em.. De acuerdo.-
Guarde nuevamente el celular en el bolso y abotone mi blusa en la parte de mi pecho.
-Pero tienes que ir hoy.. Chris estará feliz de verte.. Siempre lo esta cuando alguno de sus amigos aparece por el Diamond Stars.-

-Iré, no me lo perdería por nada del mundo, te lo aseguro.

Sonreí abiertamente, una sonrisa totalmente sincera, aunque escondía muchísimas cosas.
Tan solo tenía que planear una distracción (lo cual sería sencillo) para que su adorado esposo llegará un poco más tarde de lo acordado.

-¿A qué hora va él?

-Se supone que hoy estará desde la apertura que es a las 21:00hrs... Pasará por mi y luego iremos para allá.-
En realidad pasaria por mi, tendriamos sexo desenfrenado en el auto y luego iriamos al Diamond.. pero eso no tenia por qué contarselo.

Asentí con seriedad.

-Entonces estaré ahí a esa hora... tal vez unos minutos después, pero no será mucho.

Volví a dedicarle una sonrisa y mire mi reloj por un momento.

-Vaya, no pensé que era tan tarde.

Mire la pantalla de mi celular e hice una mueca.. Para mi era demasiado temprano.
-Son recien las 17:30, aun queda sol y un rato más pra broncearse.-
Solte una suave risa.

-Para ti... para alguien como yo, que no soy dueño del bar donde trabajo...

Reí suavemente.

-Aunque tendré que buscar quien me reemplace está noche, es por eso que tengo que buscar a alguna persona, porque no puedo faltar a esta invitación.

Con un dedo di un golpecito a la tarjeta que me había dado y aún tenía en la otra mano.

-De acuerdo.. Entonces no te quito más tiempo... Porque realmente deseo verte en el Diamond esta noche.-
Es que me habia caido bien por el simple hecho de que se habia notado que detestaba tanto a Clarita como yo lo hacia.

-Detesto irme con tal agradable compañía, pero es lo que toca al ser un pobre trabajador.

Reí suavemente y me puse en cuclillas sin dejar de mirarla.

-Nos veremos está noche, Yvaine... puedo llamarte así, ¿verdad?

Por unos momentos detestaba el plan que tenía en mente, pues se notaba que ella era una persona realmente agradable.

-Yvaine... Yvi.. Como desees.-
Sonrei amablemente mientras me quitaba de nueva cuenta la blusa y me acomodaba boca abajo sobre la toalla.

-De acuerdo, Yvi.

Sonreí y me puse de pie.
Me fue inevitable mirar su cuerpo... es que si era una hermosa mujer y con ese bikini, no dejaba mucho a la imaginación.

-Nos veremos en la noche, entonces.

Al notar que me miraba, hice un gesto de despedida con la mano para después darme la vuelta y caminar a mi auto.

-Adios, Leonard.. Nos vemos en la noche.-
Sonrei con amabilidad para luego hacer un gesto de adios con la mano. Cuando estuvo lo suficientemente lejos solte el amarre del bikini y me dispuse a seguir tomando sol.